Veracruz: el peor desarrollo del país

Encuentro Yunes-Duarte, no fue reconciliación

Aumentaron los delitos de alto impacto

 

Marco Antonio Aguirre Rodríguez

 

Místicos y Terrenales

 

Aún cuando el gobernador Javier Duarte asegura que Veracruz tiene crecimiento económico, los indicadores siempre dicen lo contrario.

La iniciativa “México ¿Cómo vamos?”, en sus últimos “Semáforos económicos estatales”, correspondientes al 2015, muestra a Veracruz como el estado que menor desarrollo ha tenido en el último año.

Y esto es concordante con las cifras que proporcionó el Consejo Nacional de Evaluación de la Política de Desarrollo Social (Coneval), en el sentido de que la población en pobreza en Veracruz pasó del 52.6% al 58%.

La medición no lleva una tendencia ideológica, si no que se realiza por un grupo de académicos y expertos en economía y política pública de diversas instituciones, entre las que destacan universidades como CIDE, COLMEX, Harvard, ITAM, ITESM y UNAM, y centros de investigación como IMCO, México Evalúa, CIDAC y CEEY (http://goo.gl/LPhb3n)

Entonces no hay forma de acusar que existe un sesgo premeditado hacia Veracruz.

En la última medición, correspondiente a agosto del 2015, Veracruz tuvo una puntuación de apenas 5 puntos sobre 120; esa misma baja calificación fue la que logró en la medición anterior, presentada en febrero de este año.

El puntaje mayor fue de 95, para Chihuahua, lejos, muy lejos, de los 5 obtenidos por Veracruz.

Así, el estado lleva un año siendo un lastre para el desarrollo económico del país, junto con Oaxaca, el otro estado que también ha presentado la misma puntuación.

Veracruz es la cola del tren, pero que además detiene a todos los demás vagones.

Los “Semáforos Económicos Estatales” sustentan su metodología dando seguimiento a (1) el crecimiento económico, (2) la generación de empleos y a (3) ocho variables económicas necesarias para fomentar las dos anteriores: productividad, pobreza salarial, exportaciones, estado de derecho, deuda pública, formalidad, diversificación laboral y desigualdad.

Como semáforo, el verde significa avance, el amarillo, estacamiento y el rojo, retroceso.

Y en este panorama, de las 10 mediciones que se hacen, Veracruz tiene 9 en rojo y apenas 1 en amarillo, la correspondiente al “Estado de Derecho”, en lo referente a “Reducir robo de auto por cada 10 mil vehículos”.

Pero en lugar de reducirlo, se incrementó: En julio de 2014 eran 31 automóviles los que se robaban por cada 10,000 vehículos; en julio del 2015 ya eran 35.

Estos semáforos muestran que el crecimiento económico se dio sólo un 0.8% al primer trimestre del 2015, mientras que la meta era de 6% anual. Muy, muy lejos de lo proyectado.

Pero de los peores fracasos económicos que ha tenido el gobierno de Javier Duarte, es en la creación de empleos, donde al segundo trimestre del año se perdieron 18,155 (“destrucción” de empleos, le llaman en los semáforos económicos); la meta original era lograr 13,100 empleos nuevos, o sea que en realidad son 41,255 plazas de trabajo menos de las que deberían existir. Fue el peor de los resultados en este renglón.

Veracruz es el segundo estado con el mayor aumento en el porcentaje de su población en situación de pobreza laboral, solo después de Nayarit, pasando de 49.9% a 52% (aumento de 2.1 puntos porcentuales).

La “pobreza laboral” la definen como “la población que no puede adquirir canasta alimentaria con su ingreso laboral”.

Esto significa que los pocos empleos que se mantuvieron tienen un valor salarial menor que en los demás estados.

La pobreza, la miseria de la población en general, se nota igualmente porque los trabajos informales en lugar de reducir se incrementaron.

Por esto mismo es que tampoco se pudo reducir la desigualdad del ingreso, que quedó en 0.422.

Así pues, ¿dónde está el crecimiento económico?.

Los terrenales, al igual que los expertos de “México ¿Cómo vamos?” lo único que vemos es pobreza creciente e ineficacia administrativa.

La verdad nos hará libres, dijo Javier Duarte. Si esto es así, debería de reconocer su fracaso como gobernador.

 

ENCUENTRO YUNES-DUARTE, NO FUE RECONCILIACIÓN. La semana pasada se filtró una versión en el sentido de que el senador José Yunes Zorrilla tuvo una reunión con el gobernador Javier Duarte y que presumiblemente había sido con fines de reconciliación.

Pero no fue así.

José Yunes ratificó que se dio el encuentro, pero que fue como mediador de un grupo de contratistas a los que el gobierno del estado les debe dinero y que ahí, en la reunión, aprovecho para plantearle a Javier Duarte su postura de mejorar las condiciones financieras del estado.

Esto “no es de afectos o desafectos, si no de atender lo que le conviene a Veracruz, es un tema institucional, que es lo que nos llevó a sentarnos para hablar, y también fue un encuentro de definición política y de posicionamiento”, afirmó Pepe Yunes.

El tema fue el financiero, y la propuesta sumar a la Comisión de Hacienda del Senado, que preside el mismo José Yunes, “para encontrar respuesta a la enorme escasez de recursos y poderle cumplir a proveedores y contratistas”.

Pero insistió en que Javier Duarte tiene que hacer un esfuerzo para generar condiciones de reordenamiento de su administración, así como un esfuerzo en transparencia y rendición de cuentas, ya que la deuda real supera por mucho los 44 mil millones de pesos que reconoció en su mensaje del lunes.

“Son 44 mil millones los registrados con el sistema financiero, pero deuda, hay que decirlo con todas sus letras, es toda aquella obligación que compromete recursos futuros; ahí solo estamos considerando lo que se pidió prestado. Hay que sumarle todo lo que son estos instrumentos de PPS, de APS, hay que sumarle las presiones que por ley obliga el IPE, hay que tener en cuenta los adeudos con el IMSS y hay que tener en cuenta también los pasivos contingentes con contratistas y prestadores de servicios y proveedores. No hay una cifra clara pero desde luego que es mucho más de 44 mil 470.8 millones de pesos; hay voces que las señalan en 80 mil millones de pesos de menos”, puntualizó.

 

AUMENTARON LOS DELITOS DE ALTO IMPACTO. El Financiero publicó éste 19 de agosto un comparativo de los delitos de “alto impacto” cometidos en Veracruz en los primeros 4 años de los tres últimos gobiernos estatales, el de Miguel Alemán, el de Fidel Herrera y el de Javier Duarte, , según los datos del Sistema Nacional de Seguridad Pública (SNSP).

La nota de El Financiero además de ésta evidencia menciona que la gestión del actual gobernador ha sido fuertemente criticada en las últimas semanas por la muerte del fotoperiodista Rubén Espinosa y la activista Nadia Vera, quienes antes de ser asesinados en la colonia Narvarte –el 31 de julio, junto con Yesenia Quiroz, Mile Virginia Martín y Alejandra Negrete–, señalaron que personas ligadas al gobierno veracruzano los habían amenazado.

La nota apunta que en el caso de homicidios dolosos en los primeros cuatro años del mandato de Miguel Alemán se registraron 1,972, y en el de Fidel Herrera 1,848, mientras que con Duarte la cifra creció más de 60 por ciento al registrarse 3 mil 208 casos.

En cuanto a los plagios, con Miguel Alemán fueron 29, con Fidel Herrera 36 y con Duarte de Ochoa, se han consumado 404.

En tanto, el robo de vehículo con violencia pasó de los 922 episodios con Miguel Alemán, a 6 mil 457 con el actual mandatario; y el robo sin violencia se elevó de 3 mil 692 a 19 mil 623, (más de 400 por ciento).

Respecto a las extorsiones en la entidad veracruzana, la base de datos del Secretariado Ejecutivo también muestra un salto, ya que éstas pasaron de 247 y 950 eventos, a mil 563.